
For her, the “bogeyman” existed and was called Changes, but it also answered by other names and had other faces.
Todavía no entendía cómo funcionaba esta nueva edad de las trevas…
Después de todo, de todas las transiciones, todavía tenía que adaptarse a esta nueva realidad llena de temeridades.
Y para ella, el “Coco”existía y se llamaba Mudanzas, pero también respondía con otros nombres y tenía otras caras.